martes, 26 de agosto de 2008

El espíritu de Formentor... ¿volverá?


Foto: Gheeke/ Licencia Creative Commons

http://www.que.es/mallorca/noticias/formentor-la-formula-contra-la-mediocridad-literaria.html
y
Estas declaraciones de Muchnick que no tienen desperdicio (En rojo, mi aportación):

El editor independiente y escritor argentino Mario Muchnik ha asegurado que el mundo literario está sumido en una "decadencia espantosa", debida "en gran parte" a la estructura económica del sector editorial, en la que dominan los grandes grupos y en la que se discrimina a las pequeñas firmas lo que "hace que muchos escritores sean rechazados hoy en día".

"Actualmente las grandes editoriales exigen un mínimo del 15 por ciento de margen de beneficio libro por libro", algo con lo que, a su juicio, "nunca se habría podido editar Kafka, ni Proust, ni Joyce, ni Beckett".

Este argentino radicado en Madrid ha ocupado cargos directivos en importantes editoriales y actualmente es propietario de la firma independiente Taller de Mario Muchnik, fundada en 1998.

"Las independientes son pequeñas y no tienen fuerza, son muy enclenques con respecto a los grandes grupos".

Quieren dejar fuera de los nuevos Formentor a los editores

Acerca de los premios, este editor independiente afirma que "hay varias propuestas sobre la mesa, incluso que los editores no tengan nada que ver con los premios Formentor", aunque este aspecto aún está por concretar en los debates que se prolongarán hasta mañana.

En caso contrario, añade, se podrían reeditar contando con ellos si se hace "con cierta clase, con total honestidad y si se pueden evitar las presiones". (O sea, imposible)

"Lo importante -indica- es evitar toda presión de los unos sobre los otros: discusiones, todas las que se quiera, persuasión y bronca".

Asimismo, el editor y escritor opina que, de reeditarse, los premios Formentor deberían ser galardones independientes de las instituciones nacionales y regionales y con "el libro como soporte", sin limitarse a la narrativa.

A su juicio, deberían ampliarse así al ensayo narrativo o artístico, quizás rotando cada año las especialidades.

Sin embargo, el argentino ha incidido en que los premios no son lo más importante de esta cita en Formentor, sino que lo "extraordinario, singular y fuera de lo común" son las propias conversaciones que se desarrollan estos días.

Con ellas y, quizá, con la recuperación de los premios, Muchnik incide en que Formentor puede "brillar" de nuevo y atraer a conocidos escritores, tal y como Roland Garrós da cita cada año a los mejores tenistas. (Pues, nada ya la hemos pifiado)

No quiero ser agorera, pero tal y como se está planteando el debate difícilmente se podrá recuperar el espíritu que tanto añoran. Y es que luchar contra las grandes editoriales es una quijotada: la estructura seguirá igual y el único espíritu Formentor posible es el que surge y nace en las alcantarillas de la literatura, allá donde no se asoman los grandes, allá donde hay verdadera libertad y no se escucha hablar de rentabilidad económica de la edición: las pequeñas editoriales, las independientes, las pequeñas librerías, las supervivientes, ahí está el espíritu Formnetor, ahí está el debate... Bueno, démosles un voto de confianza.

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