Una noche magnífica de poesía barera, con la sorpresa de ver a Carlos Salem en El Dorado. De aquella tarde-noche del sábado me quedo con la dulzura y la feminidad de Isabel García Mellado, la sensibilidad de Marcus Vesus, el desgarro de Javier Das y José Angel Barrueco y la bondad de Gsus Bonilla.
Y este poema de Isabel García Mellado, con el que comparto complicidades y rutas palabreras, esta noche más que nunca:
tengo sueño de mí
hambre de tí
necesidad del resto
voy flotando
hoy no toco el suelo
tengo un tango cosido de puñales
y una deuda eterna con las dudas
tengo ganas de dejar de pensar
pero él nunca me deja
tengo una patada en el culo que puede sonar a nueva
pero es simplemente la vida y el rastro de nuestras peleas
tengo el odio guardaito que veces se emparanoia
tengo el césped sembrado de estrellas
y una casa
con un corazón colgado en la pared
dentro de un marco
tengo los ojos fijos en un deseo que no se cumple
tengo la boca seca de incertidumbre
tengo el día menos pensado a la vuelta de la esquina
un bar de poetas
un ritmo de escombros parecido a la fe
un silencio predilecto
un amor descontrolado
una espina venenosa
que me cura la sangre para luego
poder matarme con la lengua
tengo un monstruo malsano
una madre y hermanos
tengo ganas de darme mis preferid@s
tengo que rescatarme
tengo ansia de vino
tengo que colocarme y volverme destino
y cantarle a la luna que me pinte la piel
pa ir desnuda a buscarle y quedarme con él
tengo un lío tremendo montao en mis cajones
porque es que en este cuento
no hay nadie a quien permita
quitarle a mis caprichos los putos pantalones
Isabel García Mellado
Tic Tac Toc Toc
Ed. Ya lo dijo Casimiro Parker
2 comentarios:
alicia, fue un placer
y me traigo muchas y buenas
sensaciones, tienes un espacio maravilloso donde abrigar la creación y el arte, y eso te honra.
que no decaíga la poesía por vuestros rincones.
merece mucho, la alegría.
gracias por todo, por tu acogimiento y por ser como soís.
bsos.
Gracias a ti Gsus. Con vosotros confirmé muchas cosas que ya están iniciándose desde El Dorado. Habéis abierto un camino difícil y somos muchos en él. Un abrazo grande.
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